sábado, 11 de febrero de 2012

Bunge contra Lacan: la serpiente que se muerde la cola


En su Diccionario de filosofía (Siglo XXI, 2005) Mario Bunge acuña neologismos malintencionados para desprestigiar a aquellas corrientes filosóficas o teóricas con las que no comulga (chatarra filosófica, para utilizar un término de él). Como es su costumbre esgrime argumentos venenosos en contra de la filosofía lingüística, el marxismo… y el psicoanálisis.

Es sumamente llamativo encontrar que aquellos términos con los que él trabaja y considera correctos, están definidos en términos bastante serios, sin embargo casi la mitad de su libro está dedicado a ironizar sobre lo que le desagrada.

Uno de los términos que considera digno de ser mencionado en su reducido vocabulario, es Charlacanismo que lo define como “género literario introducido por el psicoanalista frances Jacques Lacan, quien admitió que el psicoanálisis no es ciencia sino "l´art du bavardage"”. Con esta definición, de pretensiones humorísticas, intenta vincular al psicoanálisis lacaniano con la charlatanería.

Uno de los términos que maneja Bunge “seriamente” es Contexto que lo define como “cualquier dominio o universo del discurso al que pertenece un determinado elemento o en el que está inserto… La indicación del contexto es importante, pues aunque un constructo puede tener sentido en un contexto, en otros puede ser un sinsentido. Tan importante es que un truco retórico común, aunque deshonesto, es la cita de frases fuera de contexto”.

Una vez dicho por él mismo que un truco retórico deshonesto es citar frases fuera de contexto, trascribamos aquí el fragmento de donde es tomada la frase de Lacan:

[el psicoanálisis] es una práctica que, dure lo que dure, es una práctica de charlatanería (bavardage). Ninguna charlatanería carece de riesgos. Ya la palabra charlatanería implica algo. Lo que implica está suficientemente dicho por la palabra charlatanería, lo que quiere decir que no hay más que frases, es decir lo que se llama "las proposiciones" que implican consecuencias, las palabras también. La charlatanería lleva la palabra al rango de babear (baver) o de espurrear, la reduce a la suerte de salpicadura (éclaboussement) que resulta de eso” (Seminario 25, El momento de concluir. Inédito).

Resulta obvio que el psicoanalista francés utiliza “bavardage” (charlatenería) en este contexto, bajo el entendido de práctica que se basa en la charla, pues “no hay más que frases”. Pero dicha afirmación, tomada de manera aislada, hace decir lo que Mario Bunge busca.

Así pues, hubiese sido conveniente que el autor del citado diccionario debió haber incorporado otro término en su libro, el de Ouroboros: “Símbolo de origen egipcio que presenta una serpiente que muerde su propia cola. En el campo teórico sirve para designar aquellos filósofos que implementando sus propios argumentos se pueden refutar. Sinónimo: Bunge”.

18 comentarios:

  1. Vamos a citar a Lacan: "Nuestra práctica es una estafa, fanfarronear, hacer pestañear a la gente, deslumbrarla con palabras rebuscadas, es lo que habitualmente llamamos "rebuscado". (...) Desde el punto de vista ético, es insostenible nuestra profesión; es por eso que me enferma, porque tengo un superyó como todo el mundo."
    Desde luego, como de toda cita alguien puede alegar que está fuera de contexto, con lo que esta cita no valdría nada.
    Para desenmascarar a chantas como Lacan y otros vendedores de confusión, pocas cosas tan buenas como leerse "Imposturas intelectuales" el librito de Alan Sokal.

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  2. Orlando, me gustaría tener la referencia de la cita que transcribes, sólo por curiosidad...

    Por supuesto que Alan Sokal y su colega Jean Bricmont están enfadadísimos, al igual que Bunge, con toda filosofía que no sea neopositivista. Su libro, como tantos en el mercado, (por ahí anda un interesante "Libro negro de psicoanálisis" o incluso el nuevo libro de Onfray "Freud, el ocaso de un ídolo") agreden abiertamente lo que no comprenden.

    Particularmente en Imposturas intelectuales lo que más les molesta es que extraigan términos de la ciencia y los revistan de otro significado, si los leemos bajo el primer criterio únicamente y como si fuera el único correcto, entonces por supuesto que son "impostores".

    ¡Saludos y gracias por comentar!

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  3. "...al igual que Bunge, con toda filosofía que no sea neopositivista"
    Te sugiero que googlees "mario bunge" y vayas a la sección libros. Allí encontrarás algunas cosas que sugieren lo contrario
    También, y más sencillo, podés googlear cosas como neopositivismo o empirismo lógico. Se lo menciona a Bunge como un crítico.
    En cada caso podrás ir haciéndote a la idea de que no solamente Bunge no es positivista ni neopositivista, sino que hace sus críticas. Un poco de indagación en la parte de libros terminará de convencerte de que bunge no es neopositivista. Más todavía, critica estas posiciones.

    Sobre Sokal y Bricmont no conozco más que sus "Imposturas intelectuales", y no he visto allí apoyo implícito al neopositivismo. Lo que es obvio que les molesta es la actitud mendaz de utilizar términos científicos con el propósito de impresionar a la gilada, a sabiendas de que no quieren decir nada Más refinados, son los Horacio Horangel o los Luis María Domínguez, solamente que atrapan, engañan y confunden a un público más culto pero no más inmune al fraude.

    Saludos, y gracias por dejarnos comentar.

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  4. Por razones obvias de tiempo y espacio, Bunge no pertenece al Círculo de Viena, si es lo que entiendes por neopositivismo.

    Si echas un vistazo más a fondo te darás cuenta que sigue los mismos postulados:
    a) negación de toda metafísica
    b) la lógica es el instrumento a través del cuál podemos construir una ciencia
    c)la ciencia es el único conocimiento objetivo (verdadero)

    Si tienes algún artículo o libro en donde tácitamente critique al neopositivismo (no a algún autor en particular) me comentas.

    Te agradezco si me pasas también la referencia de la cita de Lacan que posteaste en el primer comentario.

    ¡Saludos!

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    1. Responder tres años mas tarde algo que respondiste a otra persona es casi un despropósito, pero me veo obligado, primero para esclarecer la postura epistemologica de Mario Bunge, y segundo, para aclarar de donde es la cita de Charlacán, digo Lacan. Mario Bunge es efectivamente uno de los críticos mas feroces del neopositivismo, si alguna vez lo has leido (cosa que es obvia que jamás has hecho) te darás cuenta que critica constantemente a Popper y a los neopositivistas, que habla de la lógica como solamente una herramienta para hacer mas entendible lo escrito y sobre todo porque el SI QUE ESCRIBE METAFÍSICA. De hecho escribió DOS tomos de su treatise de filosofia sobre ontología. Segundo: la cita en la que Lacan se hace cargo de su charlatanería la encuentras en Le Nouvel Observateur, Nº 880, p.88, que trata una conferencia dada por el estafador, perdón, Lacan, el 26 de febrero de 1977.

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    2. ¿Bunge neopositivista porque cae en la "negación de toda metafísica"? Ay porfavor, si tiene libros completos que dedica enteramente a discusiones netamente metafísicas, por ejemplo, revisa los 8 tomos del Treatise on basic philosophy o para que te tomes menos tiempo, lee su artículo "¿Es posible una metafísica científica?"

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  5. Lacan es un charlatán en el peor sentido, el corriente y moliente de la palabra. Además su psicoanálisis no se desprende, allí donde se entiende algo, de los tópicos hostiiles a la infancia de lo que Alice Miller llama pedagogía negra. Trabajé un año con lacanianos de la escuela de Maud mannoni en París y no me impresionó nada su manera de tratar a los niños. Eran tan despectivos y negativos con ellos como el resto de educadores de otras filosofías, sólo que más pedantes.

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  6. Hola Juan, gracias por tomar un momento para hacer este comentario. No puedo más que coincidir con tu visión de algunos lacanianos, que desde ve tú a saber qué lugar (uno más allá del saber, definitivamente) enjuician desde la trinchera del malentendido lo que ellos quieren.

    Quizá en lo único que puedo no estar de acuerdo con tu opinión es desacreditar a Lacan, si algunos de sus discípulos han hecho quién sabe qué cosas con su nombre, eso es otro asunto. Creo que es un autor al que hay que leer y extraer de él aquello que realmente merece la pena, y que como otros, también erró.

    Los "lacanianos" no puedo considerarlos a todos iguales, también he conocido gente muy pensante en esa línea.

    ¡Saludos!

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  7. José, tú dices que el neopositivismo de Mario Bunge (algo disparatado de sostener) se caracteriza porque:
    "a) negación de toda metafísica
    b) la lógica es el instrumento a través del cuál podemos construir una ciencia
    c)la ciencia es el único conocimiento objetivo (verdadero)"

    Y yo te pregunto, ¿acaso no todas las teorías científicas promueven esos pilares? Esos pilares se fundaron a inicios de la edad moderna mucho antes de la existencia del positivismo que era una ideología no un teoría y por obvias razones mucho antes del neopositivismo del cual no has leído en absoluto.
    Muchas doctrinas científicas exigen esos cánones, que si piensas un poco más, verás que son en extremo básicos y fundamentales, nada que caracterice en sí a una corriente específica en particular. La neurología, la geografía, la neurociencia, la biología, la arqueología, la antropología, la matemática, la física, la psicología, el psicoanálisis inglés, el neuropsicoanálisis, las ciencias cognitivas, los fractales, el análisis reticular, la gramática, la cibernética y todas las teorías o disciplinas que se te antojen, mientras sean científicas usan esos pilares.
    Si alguna disciplina no usara esos principios pues terminaría siendo metafísica o charlatanería, es decir: lacanismo.

    Ay, posmodernos, nunca saben nada de lo que hablan.

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    1. No puedo más que no estar de acuerdo. En primer lugar, me preguntas si acaso no todas las teorías científicas sostienen esos principios, es obvio que si tomado en el sentido de ciencia en la actualidad, la mayoría sí. De hecho es precisamente lo que he dicho de Bunge, que él está inmerso en la corriente que considera que sólo lo cientifíco es verdadero, ¿te parece tan evidente que esta afirmación se pueda sostener? A mí no, hay diferentes vías para acceder a la verdad, sin utilizar el método científico.

      Lamento informarte que el psicoanálisis inglés dista demasiado de usar la lógica como instrumento para construir la ciencia, pues siguen de una manera bastante particular los postulados freudianos sobre la lógica del inconsciente (no existe el principio de contradicción, el inconsciente es atemporal), una leída no caería mal. En cuanto a las disciplinas como la matemática (que su base es la demostración no el conocimiento científico entendido como comprobación), la antropología (echa un vistazo a Lévi-Strauss) o la psicología (¿cuál de las miles que hay?) es claro que estás desinformado sobre sus métodos de estudio para sus respectivos campos. La matemática es formal (no es ciencia en el sentido empírico).

      Te invito a reflexionar un poco sobre la epistemología de cada una de las disciplinas que hablas, verás que no todas coinciden en que la ciencia (entendida como el conocimiento comprobable, experimental) es el verdadero.

      Saludos

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  8. El psicoanálisis suele incurrir en un error epistemológico común: confundir sus constructos teóricos (el inconsciente o la transferencia, por ejemplo) con cosas.

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    1. Anónimo: Me gustaría que ampliaras un poco tu comentario, no comprendo lo que dices.

      Saludos

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  9. "La topología no está hecha para guiarnos en la estructura. La estructura lo es en sí misma -como una retroacción del orden secuencial en que consiste el lenguaje.
    La estructura es lo aesférico oculto en la articulación lingüística en tanto un efecto de sujeto se apodera de ella.
    Es evidente que, por lo que se refiere al significado, éste se apodera de la subfrase, pseudomodal, se refleja desde el objeto mismo que, como verbo, envuelve en su sujeto gramatical y que hay un falso efecto de sentido, una resonancia de lo imaginario inducida por la topología, según que el efecto de sujeto cree un torbellino de aesfera o que lo subjetivo de este efecto se refleje a partir de él"
    J.Lacan, L´Étourdit

    Ante su poderosa tiniebla (estoy parafraseando a Borges), son casi límpidas estas pobres líneas que repito:

    El psicoanálisis suele incurrir en un error epistemológico común: confundir sus constructos teóricos (el inconsciente o la transferencia, por ejemplo) con cosas.

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  10. http://hipotesis-carolus.blogspot.com.es/2007/04/lacan-o-la-virtud-de-una-estafa-que-no.html

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  11. sin ser críticos con lo que nos causa placer no se llega a ningún lado, Bunge no es neopositivista para nada, el autor del artículo, un simple posmoderno, y Lacan, uno de los 4 jinetes del apocalipsis intelectual del posmodernaje.

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  12. Lacan es un chanta de mierda jajaja. 90% mentira y engaño, 10% de aciertos y luces interesantes. Pero con esa tasa de fracaso, entra en la categoría antes mencionada. Porque, además, sus "errores" son voluntarios. Simplemente se aprovecha de gente intelectualmente inferior (sí, el viejo era muy muy inteligente)... y hasta el día de hoy tenemos gente orándole y defendiéndole, considerando que o no entienden lo que él dijo, o lo defienden en base a el 10% mencionado. Nunca tuvo respeto por su audiencia, por la evidencia, por la ciencia o por el sentido: jugaba a engatuzar en base a juegos de palabras y, sobre todo, la estupidez del ignorante que necesita el lugar del supuesto saber. Sokal y Bricmont lo destruyen con facilidad: si alguien está en desacuerdo, o no los ha leido, o tiene problemas serios de comprensión (lo que sería curioso, considerando que son capaces de "entender" los sinsentido del "maestro". En fin... siempre ha habido dos tipos de personas: los que quieren saber, y los que quieren creer. A dios muerto, dios puesto.

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  13. Francamente, nunca me suelo molestar con la argumentación de otras personas, es algo totalmente atípico en mí y pensé que era imposible. Pero tu defensa patológica en defender a esta seudociencia parecida a la frenología del siglo xix me ha causado indigestión y un poco de lástima ajena. Creo que lo que más naúseas me da es tu seguridad absurda y terquedad, no hay peor ciego que el que no quiere ver.

    Lo peor de todo hasta ahora es el trauma que tienen ciertos posmodernos con la razón, pareciera que la quisieran negar o achacarle todo lo malo desde que salió el libro "dialéctica de la ilustración", el racionalismo moderno es aliado del capitalismo como si buscar una aproximación hacia la realidad que no sea un malabar de conceptos sin sentido fuera reprimir, el irracionalismo provocó que se quemaran brujas en el pasado, provoca que mucha gente muera de epidemias, la cultura de la ablación femenina, etcétera en fin tanto que se puede decir.

    Hasta las religiones tradicionales me parecen más respetables que el psicoanálisis, porque al menos estas se inscriben en un contexto determinado, hay una historia y tienen presupuestos que uno ya sabe de ante mano son cosmovisiones religiosas, discusiones teológicas, etcétera. Pero con Charlacan, ¿uno me pregunto cómo le hace?

    Habla de matemáticas y usa metáforas abstrusas que solo vuelven más oscuros sus conceptos (si no los conoces es, porque no fuiste a sus seminarios)
    Creador del estadio del espejo, concepto no falsable que termina por darle una importancia tan omnipresente que puede terminar por hacer mucho daño presumiendo que la identidad se produce en ese contexto sin pruebas
    Sus defensores son alérgicos a todo lo que signifique ciencia, el lenguaje simbólico, los binarismos y la lógica los reprimen, ellos quieren vivir en el registro (ficticio) de lo imaginario y lo real
    su filosofía no le llega ni a los talones a la filosofía oriental de la que provienen sus conceptos por cierto (Freud leyó a Schopenhauer y a Nietzsche y estos a su vez a los orientales)
    Hace pasar
    Y podría seguir y no acabaría, en síntesis, la teoría lacaniana hace más daño que bien, es abstrusa, son puros seminarios y encima el hombre no se deja entender, como si de un gurú se tratara, ni siquiera leyendo a Derrida sentí que me estaban tomando tanto el pelo como con Jacques Lacan.

    Para mí, es el charlatán más astuto de las ciencias sociales contemporáneas.

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